Federico García Lorca, uno de los poetas más influyentes del siglo XX, dejó una marca indeleble en la literatura española con su poesía emocional y evocadora. Un ejemplo destacado es su poema "Romance de la Luna, Luna", que nos sumerge en un mundo de simbolismo y emotividad.
El poema "Romance de la Luna, Luna" habla de la luna como un ser vivo, personificando su belleza y misterio. A través de versos como "La luna vino a la fragua con su polisón de nardos" y "La niña de blanco está", Lorca crea una imagen vívida de la luna descendiendo a la fragua, un lugar asociado con el trabajo duro y la creación.
La elección de palabras como "polisón de nardos" resalta la feminidad y fragilidad de la luna, al tiempo que sugiere su poder seductor. A umdemás, la luna es testigo de la tragedia que se desarrolla en la fragua, donde el herrero mata a su hijo. Esto simboliza el ciclo de vida y muerte, así como la dualidad de la naturaleza humana.
"La luna vino a la fragua
con su polisón de nardos.
El niño la mira, mira.
El niño la está mirando.
En el aire conmovido
mueve la luna sus brazos
y enseña, lúbrica y pura,
sus senos de duro estaño.
Huye luna, luna, luna.
Si vinieran los gitanos,
harían con tu corazón
collares y anillos blancos.
Niño, déjame que baile.
Cuando vengan los gitanos,
te encontrarán sobre el yunque
con los ojillos cerrados.
Huye luna, luna, luna,
que ya siento sus caballos.
Niño, déjame, no pises,
mi blancor almidonado.
El jinete se acercaba
tocando el tambor del llano.
Dentro de la fragua el niño,
tiene los ojillos cerrados.
Por el olivar ven'an,
bronce y sueño, los gitanos.
Las cabezas levantadas
y los ojos entornados.
¡Cómo canta la zumaya,
ay, cómo canta en el árbol!
Por el cielo va la luna
con el niño de la mano.
Dentro de la fragua lloran,
dando gritos, los gitanos.
El aire la vela, vela.
El aire la está velando.
El poema nos lleva a un viaje emocional, explorando temas como la vida, la muerte, la belleza y la fragilidad. García Lorca utiliza un lenguaje poético rico en metáforas y simbolismo para crear un impacto profundo en el lector. "Romance de la Luna, Luna" no solo es una obra maestra de la poesía, sino también una ventana a la mente creativa y sensible del autor.
En resumen, el poema "Romance de la Luna, Luna" de García Lorca captura la esencia de su estilo lírico y su habilidad para explorar temas universales a través de la poesía. La personificación de la luna y la creación de imágenes vívidas hacen que este poema sea una muestra sobresaliente de la profundidad y el poder de la poesía de Lorca.
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